23 de junio de 2012
Capítulo 4x06
16:57
Lola estaba en su habitación escribiendo en un diario.
LOLA: Querido diario, hoy es un día triste, ya hace varios días que no veo a mi Calvin, le echo mucho de menos. Todas las mañanas lo primero que hago es… Bueno, no, lo primero que hago es meterme los dedos, pero le segundo y lo más importante es que me acuerdo de mi Calvin, esos momentos que hemos pasado juntos, ains… Aun me acuerdo de ese primer encuentro que tuvimos, él salía de la ducha y yo entraba al baño porque me había dado un apretón, ¡benditos Activias! Nuestras miradas se cruzaron y nuestros cuerpos hablaron, nos lo montamos en ese cuarto de baño, cochambroso, la verdad sea dicha… Y a partir de ahí nuestra relación ha ido viento en pompa, te echaré mucho de menos mi Calvin…
Rocío entra la habitación interrumpiendo a Lola.
LOLA: ¡¿Pero bueno?! ¿Qué falta de respeto es esta? ¡Que estaba creando!
ROCÍO: ¿Creando el qué?
LOLA: Estoy escribiendo mi diario, quiero que cuando muera uno de vosotros escriba mi biografía.
ROCÍO: ¡Anda que fresca! ¡Escríbela tú que tienes demasiado tiempo libre!
LOLA: Tu gracia me chorrea, Rocío, pero yo te castigaré con mi indiferencia.
ROCÍO: Pues ale, adiós, te dejo para que sigas creando.
LOLA: ¡Súbeme un trozo de salchicha! Lo único que me alivia las penas es un buen trozo de salchicha espetec, además, su aroma me inspira.
ROCÍO: Sí, sí, espérate sentada, que ahora mismo te la traigo… (Sale da la habitación) ¡Que se la suba ella! Será fresca la tía.
Rocío cierra la puerta y baja al salón. En el salón Carlos y Sergio estaban vestidos con túnicas negras y con la cara pintada de blanco.
ROCÍO: ¡Aaaaaaah! ¡No tengo nada! ¡No tenemos dinero! ¡Violarme si queréis pero no me hagáis daño por favor!
CARLOS: ¡Rocío! Que somos Carlos y Sergio.
ROCÍO: ¿Ah sí? (Sonríe nerviosamente) Jeje, sí, claaaro… si os estaba siguiendo el rollo.
SERGIO: Pues a tu a mí no me quites el puesto de chistoso ¿eh?
ROCÍO: Bueno, y explicarme a mí que hacéis vestidos así, porque hijos… eso es un disfraz de carnaval que se lo vi yo al Richy… Que por cierto a él le queda mejor que a vosotros.
CARLOS: ¡Hemos montado una secta! (Le da una tarjeta) Los Babuinos de la Décima Galaxia.
ROCÍO: ¿Babuinos? ¿Sois monos?
SERGIO: ¡No! Los monos son los beduinos.
CARLOS: No, Sergio, los monos son los babuinos, los beduinos son los moros del desierto.
SERGIO: ¿Entonces para qué le ponemos a la secta ‘los babuinos’ sino somos monos?
CARLOS: ¡Pero si el nombre lo has decidido tú!
Avanzada la mañana Rocío iba por el parque dándose una vuelta y se encuentra con Marta.
ROCÍO: ¡Uy! ¡Hola Marta! ¿Qué taaal?
MARTA: (Casi llorando) Maal
ROCÍO: Venga adiós. (Se va).
MARTA: ¡Oh! ¡Pero bueno! ¿No me vas a preguntar por qué? Necesito una amiga urgente.
ROCÍO: Ay, hija, ¿qué te pasa?
MARTA: (Llora) Que estoy enamorada.
ROCÍO: ¡Uy! ¡Pero si la Rocy es experta en amor! Anda venga, ven, siéntate en el banco y cuéntamelo todo con pelos y señales, bueno, si eso que te gusta tiene pelo ni me lo nombres, ¿eh? Qué a mí el pelo en las partes íntimas me da mucho asco. Bueno, cuenta.
MARTA: (Se sienta en un banco), pues que estoy enamorada de Sonia y claro yo soy lesbiana y ella no y claro pues eso, me entran las dudas de si ¿le gustaré? ¿No le gustaré? Y eso sin mencionarte la incertidumbre que se me crea en mi interior de saber si es o no lesbiana ¿eh? ¡Que yo me reconcomo por dentro!
ROCÍO: ¡Uy la Sonia lesbiana! Pero si a esa le gustan los falos una cosa loca…
MARTA: Yo los odio, yo es que es ver uno y entrarme ganas de vomitar (Da una arcada) ¿Lo ves? ¡Y solo de pensarlo!
ROCÍO: Chica, que perdida estás en la vida ¿eh? Tú te hiciste psicóloga para tratarte a ti misma ¿no?
MARTA: Sí… (Llora).
ROCÍO: Bueno, yo te ayudo, seré tu alcahueta, pero no te prometo nada ¿Eh?
MARTA: ¡Muchas graciaaaaaaas! (Abraza a Rocío) Por cierto, ¿quieres un bonus?
ROCÍO: ¡Y yo un bonus pa’ qué! Si yo no estoy loca…
MARTA: Jo, nadie quiere un bonus. Oye, voy un momento al estanco, ¿me vigilas la clínica?
ROCÍO: Pues claro…
Marta se va y Rocío se queda sola en la clínica.
ROCÍO: A mí es que parece que me ven cara de tonta, todos los favores me los piden a mí, ¡todos!
Entra un paciente a la clínica.
MUJER: Hola, ¿qué tal? Vengo a pedir una cita, ¿eres tú la psicóloga?
ROCÍO: Yo no soy la psi… sí, sí, sí, soy la psicóloga, perdona es que estaba en otra cosa. A ver cuéntame.
MUJER: Ay chica, pues verás, yo es que estoy fatal del ánimo, no sé, hago cualquier cosa y me encuentro desanimada, ¿qué me puede ser?
ROCÍO: Pues um… a ver… Um… Ah sí, el ánimo es como un pene…
MUJER: ¿Cómo un pene?
ROCÍO: ¡Sí mujer! El ánimo sube y baja como los penes… ¿Qué pasa cuando el pene ve algo que le gusta? ¡Pues que sube y se excita! ¿Y cuando ve algo que le desagrada? Pues que se hunde y se baja, ¡pues eso mismo le pasa al ánimo! ¡Para estar animada tienes que hacer cosas que te gusten! Si haces algo que te gusta ya verás cómo se te sube el ánimo. ¡Déjate llevar!
MUJER: Uy, pues la reflexión es rara, pero puede servir, muchas gracias, Marta, ¿Cuánto cuesta esta sesión?
ROCÍO: Eh... ¡Doscientos euros!
MUJER: Es cara, pero ayuda, (Le da el dinero). Muchas gracias por todo, ya volveré otro día (Se va).
ROCÍO: Adiós preciosa… ¡Tooooooma! ¡Doscientos euros por la cara! ¡Si es que estoy hecha una artista! ¿Será la psicología mi verdadera vocación?
Jesús entra a casa con un folleto en la mano muy alterado.
JESÚS: ¡Unos sinvergüenzas! ¡Eso es lo que son!
AMPARO: ¿Pero qué paaaaaaaasa?
JESÚS: ¡Los alquilados que han montado una secta!
AMPARO: ¡Anda! Que ingeniosos, ¿y de qué es?
JESÚS: Leo. ‘Los Babuinos de la Décima Galaxia’, nuestra filosofía es encontrar la felicidad pero en este mundo no la vamos a encontrar. Este mundo es una cárcel para los babuinos, tenemos que encontrar nuestra propia jungla, y esa jungla está en la décima galaxia, juntos tenemos que iniciar el viaje místico hacia la felicidad.
AMPARO: Anda mira, si suena bien, y el nombre es original…
JESÚS: ¡Amparo por dios que esto es una secta! ¡Que las sectas son obras de satanás! Amparo, por dios que hemos metido al diablo en casa. ¡¿Es que no te das cuenta?!
AMPARO: Bueno, en casa no, que están en frente.
JESÚS: ¡Pues ahora mismo que voy a cantarle las cuarenta!
AMPARO: ¡Uy esperaaa! ¡Que así aprovecho y les pido el alquiler!
Jesús y Amparo se dirigieron a casa de los alquilados. Sergio y Carlos le abrieron la puerta.
SERGIO: Vulevucuseade muá sesuá.
AMPARO: ¡Uy! ¡Pero si eso es una canción guarra de esas!
SERGIO: No, perdona pero es nuestro saludo. El saludo de los babuinos.
CARLOS: Es que no se nos ocurría otro mejor.
JESÚS: ¡Voy a ser breve y conciso! ¡¡A LA PUTA CALLE!!
AMPARO: Jesús, no, que no me han pagado el mees… A ver, es que está muy alterado, lo que Jesús quiere decir que os dejéis de tonterías que todo esto es pecado, bueno como todo para él, un día de estos le pido la lista de lo que no es pecado y os la paso, que nos vendrá bien.
JESÚS: ¡Si vosotros queréis arder en el infierno pues allá vosotros pero yo no toleraré que convirtáis mi casa en una secta!
SERGIO: Pero si es una argu….
CARLOS: (Le tapa la boca a Sergio) Argu… argumentación muy buena, jeje… Pero nosotros desde los babuinos buscamos simplemente la felicidad, igual que tú con tu dios cristiano. Juntos con fuerza y amistad podremos embarcarnos en el gran viaje hacia la felicidad en la décima galaxia.
AMPARO: Que místico que suena todo, oye.
JESÚS: ¡Que no te dejes engañar por estos especímenes! ¡Y menos por el marifloro!
CARLOS: ¡A ver! A las cinco habrá una reunión en el EureKa si queréis vais y sino que os den un poquito de por culo, asín de claro.
AMPARO: ¡Mal hablado!
JESÚS: ¡Pues claro que estaré!
SERGIO: Ale, Iuropslivin aselebreision
AMPARO: ¡Uy! ¡Pero si esa es la canción de Rosa de España!
SERGIO: ¡Que no! Que es adiós en Babuino. Aaay… cuanta inculturaa, por dios… (Cierra la puerta) ¡¿Pero tú para que le dices que es verdad lo de la secta? ¡Que este es capaz de quemarnos el local!
CARLOS: Pues porque al Jesús me lo camelo yo, ya verás…
SERGIO: Ah bueno… (Ve pasar a Lola con un trozo de salchicha en la mano). ¡Mamá, vente a la reunión esta tarde para hacer bulto!
LOLA: ¿Para hacer bulto? ¡¿Me estás llamando gorda?! ¿A mí? ¿A Dolores del Ano Prieto?
SERGIO: No, si gorda no estás, no, pero como sigas así…
LOLA: Si es que la comida es lo único que me alivia las penas… Estoy tan sola... ¡Y por tu culpa! ¡Por echar a mi Calvin!
CARLOS: ¡Pues que vaya a la clínica para que Marta le haga terapia!
LOLA: Uy no, que a esa le van los jujus y no me fio ni un pelo. ¡Yo necesito un cambio en mi vida! ¡Un giro! (Sube las escaleras).
SERGIO: Ah, yo es que no sabía que significaba la palabra babuino, pero si significa mono, entonces lo cambiamos.
CARLOS: ¡Mira Sergio a mí no me vuelves loca de la picha! ¿Eh? ¡Que ya he encargado el logo!
ROCÍO: ¡Bueno a ver! ¿Y para qué queréis montar una secta?
CARLOS: Pues para conseguir dinero. Seguro que algún tonto pica, y aunque sea un eurillo pues bien recibido será… Que se nos ha ido Calvin y somos cuatro en esta casa. ¡Y el bar no nos da suficientes ingresos! Así que Rocy, si tienes algún amiguito interesado le dices que esta tarde a las cinco es la presentación de nuestra secta en el EureKa.
SERGIO: Que vengan con dinero porque si no que se queden en la calle…
ROCÍO: ¡Pues la verdad es que es buena idea! ¡Lo raro es que no se me haya ocurrido a mí!
SERGIO: ¡Bueno Carlos, vamos a repartir folletos!
ROCÍO: Uy folletos, jajaja, que gracia que me hace esa palabra.
Carlos y Sergio estaban en la exposición de su secta en el EureKa, allí estaban presentes Manuela, Amparo, Jesús, Lola, entre otros…
MANUELA: A mí es que estas cosas me dan un yuyu… Pensar que hay vida en otros planetas y que nos vigilan con sus cámaras, y están atentos a cada paso que damos, cada gesto que hacemos… ¿Te imaginas que este mundo está lleno de cámaras que nos vigilan?
AMPARO: Señora, eso se llama Gran Hermano.
MANUELA: Que místico…
AMAPARO: Mistiquisísimo.
SERGIO: Bueno, buenas tardes, bienvenidos a ‘Los Babuinos de la Décima Galaxia’. Ya, ya lo sé, muchos de vosotros os preguntaréis el porqué de este nombre… ¡Pues yo tengo la respuesta! (Piensa) Eh… em… ¡No! Yo no la tengo, o sea sí, pero Carlos la va a explicar mejor, adelante.
CARLOS: Eh… Sí… Todos somos babuinos, todos venimos del mono… Sí y claro pues… umm… Los babuinos son monos y como todos los monos viven en la jungla y aquí llenos de edificios y gases contaminantes pues no encontramos la felicidad… ¡Los babuinos necesitan hacer un viaje místico hacia la felicidad! ¡En la décima galaxia se encuentra esa jungla de la felicidad! ¡Solo si crees en el dios Babuino podrás alcanzar esa felicidad!
SERGIO: Y claro… para llegar hasta allí el viaje es muy costoso… Mañana a la hora que más brille el sol, a las tres de la tarde, se producirá el primer viaje místico… Se producirá en un precipicio cerca de aquí, claro, ¿para qué nos íbamos a ir más lejos? Bueno, pues mañana a las tres en el precipicio, y juntos, unidos de la mano nos tiraremos de él y habremos logrado llegar a la Décima Galaxia.
Todos aplauden.
CARLOS: Jeje, gracias… Pero el viaje será difícil, para ello necesitamos una cierta cantidad de dinero. Pero no somos abusivos, solo pedimos la voluntad.
SERGIO: Sí, y la voluntad son cien euros.
JESÚS: (Se registra la cartera) ¡Me cachis no tengo suelto!
AMPARO: ¿Pero le vas a dar dinero a éstos?
JESÚS: Sí, Amparo, he visto la luz, soy un babuino. ¡Tengo que ir a esa jungla de la felicidad!
AMPARO: ¡Ay la virgen que es un engaña bobos! Bueno, mira, por lo menos tienes un nuevo hobby… Tu dale dinero si quieres que yo luego los subo del alquiler y santas pascuas.
LOLA: ¡¿Y cuándo será la próxima sesión?!
CARLOS: No sé, ya veremos, ahora mi amigo Sergio repartirá unos folletos con el vocabulario de los babuinos. ¡Que os lo hayáis pasado bien y nos vemos en la Décima Galaxia!
A la noche, Sergio y Carlos estaban en el bar haciendo cuentas.
SERGIO: Quinientos, seiscientos, setecientos…
CARLOS: ¡Mil cien eurazos! ¡Y solo por decir tres tonterías de nada!
LOLA: ¡De tonterías nada! ¡Yo soy una babuina! ¡Es mi nueva religión! Oooomh… (Se va).
CARLOS: Sergio, que tu madre se ha tragado la broma.
SERGIO: ¡Déjala! Así se entretiene.
CARLOS: Por cierto, encárgate de decirle uno a uno que el viaje místico se cancela por falta de presupuestos. No vaya a ser que se tiren todos por el precipicio…
SERGIO: Vale, yo lo hago, confía en mí.
Sonia y Rocío se encontraron a la entrada de ‘El Portón del Archiduque’.
ROCÍO: ¡Sonia hermana! ¡Qué grata coincidencia!
SONIA: Sí, últimamente nos encontramos por tos los laos.
ROCÍO: Oye tía, pobrecita la Marta, me da mucha pena, está coladita por ti…
SONIA: ¡Que no soy lesbiana!
ROCÍO: ¡Pero si eso es probar! Es como cuando vas a otro país pues tienes un período de tiempo en el que te acostumbras a esa comida. ¡Que no es que yo haya ido a otro país, no! Yo es lo que oigo.
SONIA: ¡Ay que no! Déjame en paz.
ROCÍO: ¡Que Marta te quiere mucho! ¡Dale una oportunidad!
SONIA: ¡Que no! ¡Que a mí el que me gusta es Sergio! (Se tapa la boca).
ROCÍO: ¿El Sergio? ¡Pero si nada más que haces repelerle!
SONIA: Es para que note que no soy chica fácil…
ROCÍO: Demasiado tarde, bonita… ¡Además que tú a Sergio le dejas en paz que bastante tiene con lo que tiene el pobre!
SONIA: ¡¿Y a ti que más te da?! (Entra al portal).
ROCÍO: ¡Uy! ¡Y me deja con la palabra en la boca! ¡Desde luego que ya a las chonis no se las respeta! Ay Evaaa, cuanto te echo de menos… ¡Y a ver que le digo yo a Marta!
Al día siguiente, los alquilados estaban en casa como de costumbre, y Amparo llamó al timbre, Lola le abrió.
LOLA: Hola Amparo, Iufoooooooooooria
AMPARO: ¡Anda! ¡La canción esa que ganó Eurovisión!
LOLA: ¡Perdona pero es cariño en babuino! Encima que tengo un detalle bonito conmigo… ¡Paleta! (Se va).
AMPARO: (Entra a casa) ¡¡¿Dónde coño está mi marido?!!
SERGIO: ¡Y nosotros que sabemos! ¿Has mirado en la iglesia?
AMPARO: ¡He mirado en todos sitios! ¡¿Dónde me lo habéis metido?! ¡Que la culpa es vuestra por lo de la secta!
CARLOS: No, si Sergio se encargó de avisar a todos de que lo de la secta era mentira… O sea que les dijera que el viaje místico está cancelado.
SERGIO: ¡Ostras! ¡Se me olvidó!
CARLOS: ¡¿QUÉ?!
ROCÍO: ¡Uy jajaja! Pues entonces…
AMPARO: ¡No me digáis que se va a tirar por el precipicio!
SERGIO: Ay madre… (Se mira el reloj) ¡Son las tres menos diez!
AMPARO: ¡Aaaaaaaaaaaaah! ¡Yo os mato! ¡Jesúúús no te tireeees! (Sale corriendo).
SERGIO: ¡Y mi madre que también se ha ido!
ROCÍO: Bueno, esa que se tire, jaja.
Amparo, Sergio, Carlos y Rocío corrían hacia el precipicio cuando Marta se tropezó con Rocío.
MARTA: ¡Rocío! ¡¿Qué te ha dicho Sonia?!
ROCÍO: Toma, la que faltaba… Pues mira Marta, lo siento mucho, Sonia no te quiere… Está enamorada de Sergio, venga hasta luego ¡Chaaaaaaao! (Se va).
MARTA: ¡¡¿QUÉ?!! ¡Noooo! (Se da bofetones) ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? ¡¿Por qué no puedo encontrar el amor?! (Se tira al suelo llorando) Nadie me quieeeeeeere.
Pasa un hombre y le tira una monedita.
MARTA: ¡Oye! ¡Que no soy una vagabunda! (Coge la moneda) ¡Anda! Si es un euro, mira, con lo que he sacado hoy en terapia y esto ya tengo para el taxi. (Piensa) Uummm… y por el camino pienso algo para conquistar a Sonia.
Todos los babuinos estaban al borde del precipicio a punto de tirarse.
JESÚS: Ya respiro paz, ya respiro tranquilidad, el viaje va a empezar. Cojámonos todos de la mono, pues el viaje está a punto de comenzar.
LOLA: (Cierra los ojos) Juntos seremos felices en la Décima Galaxia, aaauummm, adelante.
JESÚS: Ahora todos, insipiramos, espiramos y damos un paso al frente. ¡A por la felicidad!
AMPARO: ¡Noooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo!
JESÚS: ¿Qué pasa Amparo? ¿Quieres ser mi compañero de viaje? ¡Pues venga corre que van a dar las tres!
AMPARO: ¡Que no! Que no os tiréis que es todo mentiraaaa,
LOLA: ¿¡Cómo!?
SERGIO: Que sí, que es una argucia para conseguir dinero. Bueno, la idea fue de Carlos…
CARLOS: ¡Serás mentiroso! ¡Fue tuya!
JESÚS: O sea que nos habéis engañado….
LOLA: ¿Y la décima galaxia?
SERGIO: Era mentira mamá.
Todos los miembros de la secta, se miraron entre ellos y enfurecidos corrieron a por Sergio y Carlos.
LOLA: ¡A por elloooooooooooooooooooooooooooooooooooooos!
Toda la gente fue a por Carlos y Sergio.
SERGIO: ¡Mamá estate quieta! ¡Qué soy tu hijo!
AMPARO: ¡Jajajajajajaja!
ROCÍO: ¡Yo es que me meo! Jajajajaja.
Los babuinos comenzaron a pelearse con Sergio y Carlos.
JESÚS: ¡Tirémosle por el precipicio!
CARLOS Y SERGIO: ¡NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!
AMPARO: ¡Os lo tenéis merecido! Ay jajajajaja.
Calvin y Eduardo estaban en el despacho de éste último.
EDUARDO: Pasa Calvin, no tengas miedo…
CALVIN: No, si yo no tengo miedo… Jeje.
EDUARDO: Como hablamos, soy cazatalentos y un gran productor de televisión. Tú tienes arma de artista, yo lo noto. Tú vas a ser la futura promesa de la televisión española, te lo digo yo… Con este papel que te ofrezco para mi serie darás tu paso al estrellato, te reconocerán vayas donde vayas… ¿Aceptas?
CALVIN: Hombre, si dices que tengo talento pues tendré que aprovecharlo ¿no? Venga, vale, acepto. (Firma en un papel).
EDUARDO: Por cierto, esto tiene sus consecuencias. No podrás volverte a juntar con esos alquilados y esos pelandruscos a los que llamas amigos… Ni muchísimo menos a esa vieja llamada Lola.
CALVIN: No te preocupes, nuestra amistad ha terminado. Ellos me han echado de casa.
EDUARDO: Bueno, pero no tienes por qué cortar radicalmente con ellos… Te recomiendo que sigáis en contacto.
CALVIN ¿Por?
EDUARDO: Tiempo al tiempo Calvin, tiempo al tiempo…
Los alquilados entraron a casa, Sergio y Carlos iban con los ojos morados y con un brazo roto.
LOLA: ¡Lo tenéis muy merecido! No se puede jugar así con los sentimientos de una persona. Ahora yo sin los Babuinos pues me encuentro vacía…
SERGIO: ¡Mamá! ¿Pero por qué le haces esto a tu hijo?
LOLA: (Llora dramáticamente) ¡Por echar a Calvin de mi vida!
Suena el timbre.
ROCÍO: ¡Uy! ¿Quién será?
Rocío abrió la puerta de casa, y para su sorpresa se encontró frente a ella a nada más y a nada menos que a Marta, con una maleta en la mano.
MARTA: Hola Rocío, mi casero me ha echado de casa. ¿Me puedo quedar con vosotros?
Carlos, Sergio, Lola y Rocío se miraron entre ellos asombrados, no sabían que contestar. Estaba claro que Marta tramaba algo, ¿pero el qué?
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Capítulo 4x05
LOLA: ¡Oh! Sí…. Sí… Sigue… Oh… ¡Oh Calvin! ¡OH!
CALVIN: ¿Te ha gustado?
LOLA: Tú siempre me gustas, querido, estás hecho una fiera.
Sí, efectivamente, Calvin y Lola estaban haciendo el amor. Era primera hora de la mañana y Calvin y Lola se habían reconciliado.
LOLA: ¡Cómo me gustan los polvos mañaneros! Es que esto es lo más energético que te puede pasar. ¡Ya entiendo por qué dicen que el desayuno es la mejor comida del día! No hay nada mejor que un buen falo recubierto de mermelada de melocotón.
CALVIN: Sí, sí… pero no te hagas ilusiones.
LOLA: ¡¿Cómo?! ¿¡No vamos a volver!? ¡¡Me lo debes!! ¡Yo he sacrificado mi vida para salvar la vuestra!
CALVIN: Sí, y ya me dirás por qué te tuviste que acostar con ese macarra. ¿No había otra forma de solucionarlo?
LOLA: ¡Uy mi Calvin que se me pone celoso! Jajajaja, cómo me pones.
CALVIN: ¿Yo? ¿Celoso? Jaja, que chiste. Celoso yo…
LOLA: ¡Uy! ¡Se me está ocurriendo una idea! Esta noche ponen un debate de esos en la tele y el tema es: ¿El amor tiene edad? ¡¡Nos podríamos apuntar!!
CALVIN: Sí, claro, para que Sergio nos vea por la tele y nos mate…
LOLA: ¡Qué romántico! ¡Morir a lo Romeo y Julieta! ¡Menudo capitulazo para mi biografía! ¿Eh? Ah, y seríamos hasta Trending Topic, que no sé lo que es, pero bueno, suena bien.
CALVIN: ¡Lola vuelve a la Tierra! ¡Qué tu hijo nos mata!
LOLA: ¡Ah! Ya me inventaré yo algo para que no vea la tele…
Carlos y Rocío entran a la habitación de Lola y les ven desnudos en la cama.
ROCÍO: ¡Lola, dame las sábanas que hay que lavar…las…! ¡Uy! Y con más motivo ¡So guarros! ¿Habéis vuelto?
CARLOS: No, si la cabra siempre tira al monte…
CALVIN: ¡Oye ni una palabra de esto a Sergio! ¿Eh?
ROCÍO: ¿Yo? ¡Pero si soy una tumba! Yo no soy de esas que van por ahí contando secretillos.
CARLOS: Ni yo, ni yo, mis labios están sellados.
ROCÍO: Pero claro. A mí a veces se me va la lengua… Quizás cincuenta euros me ayudarían a mantener mi boquita cerrada.
CARLOS: Oh, Rocío, no seas tan avariciosa… Pide cien, cincuenta pa ti y cincuenta pa mí, que hay que compartir.
CALVIN: ¡Ay que ver que buitres que sois!
CARLOS: ¡Somos malas! Jajajajaja.
LOLA: Por cierto, Rocy, guapa, tienes que ayudarme. Calvin y yo vamos a ir a un programa de televisión.
ROCÍO: ¡Oh! ¡¿Al Sálvame?! ¿Puedo ir yo? Por fis por fis por fis…
LOLA: ¡No! ¡Qué eres muy choni y nos dejas en ridículo!
CARLOS: Le dijo la sartén al cazo…
LOLA: Vamos a ir a El Gran Debate a debatir un temilla, pero tú te tienes que quedar aquí para que Sergio no vea el programa, porque si nos ve, nos mata.
CALVIN: ¿Podemos confiar en ti?
ROCÍO: ¡Uy por dios, Calvin, la duda ofende! ¡Vosotros dejárselo a la Rocy! Pero claro, esa ayudita lleva suplemento… ¡Cincuenta euros más!
CARLOS: ¡Cien!
LOLA: ¡Uy! Yo es que estoy pelada, ni un mísero duro que tengo, Calvin, mi amor, dáselo tú.
CALVIN: Qué remedio… (Le da el dinero)
ROCÍO: ¡Y a ver qué plan se me ocurre a mí para que Sergio no vea la tele! ¡Oh! ¡Eureka!
CARLOS: Pero si en el Eureka hay teles…
ROCÍO: ¡No tonto! Eureka de que he tenido una idea, se me ha ocurrido un buen plan… ¿Te gusta la chistorra?
CARLOS: Bueno… yo soy más de salchichas.
ROCÍO: Que picarón.
Avanzada la mañana, Rocío y Carlos se encontraron con Sergio en el salón, estaba sentado en el sofá.
ROCÍO: ¡Sergio! ¡Sergio! ¡Tengo un planazo para esta noche!
SERGIO: Di.
ROCÍO. ¡Una barbacoa en el campo, al aire libre! Con su chistorra, con sus salchichas, con sus lomos, con sus pechugas…
SERGIO: Quita, quita, que eso lleva grasas colesteroladas…
CARLOS: ¡Anda! ¿Y desde cuando sabes tú que es eso?
Carlos llegó a la clínica de Marta y abrió la puerta.
CARLOS: ¿Se puede?
MARTA: ¡Oh! Pasa, pasa… ¿Para cuando quieres cita? ¿Quieres un bonus? ¡Trescientos euros seis sesiones! ¡Toda una ganga!
CARLOS: Ah no, yo no quiero citas ni nada de eso.
MARTA: (Se levanta de la silla) ¡¡¿Entonces para qué coño vienes si no quieres una cita?!! Uy, perdón, perdón… Es que por aquí no viene ni dios.
CARLOS: Es lo que tiene montar una clínica en la periferia. Bueno, al lío, ¿te apuntas a una barbacoa?
MARTA: Lo siento, no me gusta la chistorra ni las salchichas.
CARLOS: Pues no sabes lo que te pierdes, digo…. Claro, tú eres más de almejas y mejillones ¿no?
MARTA: ¡Ahí le has dao! … … (Se le cambia el rostro de la cara) ¡¡¿Me estás discriminando por ser lesbiana?!! ¡Porque es que te parto la cara!
CARLOS: (Cagado de miedo) No, no, si yo soy gay.
MARTA: ¡Uy pues contigo me voy a llevar bien! ¡Entonces me apunto!
CARLOS: Ah, pues que bien, a la noche te recogemos. (Se dirige a la puerta).
MARTA: ¿Me traigo algo?
CARLOS: No, nada, si lo tenemos todo. (Piensa) Por cierto, ¿tienes por casualidad una barbacoa?
MARTA: Sí, creo…
CARLOS: ¡Pues llévatela que nos hará falta! ¡Chao chocho! (Se va).
MARTA: (Se pone a dar saltos de alegría) ¡SI! ¡SI! ¡SI! ¡SI! ¡TENGO UN AMIGO! ¡SI! ¡TENGO UN AMIGO! (Entra un paciente y la ve dando saltos) ¡SÍ! ¡POR FIN! ¡ME HA LLEVADO VEINTISIETE AÑOS DE MI VIDA CONSEGUIR UNO! ¡SÍ!
PACIENTE: Eh… ¿vengo en mal momento?
MARTA: (Se para en seco) ¡OH! No, adelante, adelante… (Sonríe forzosamente). ¿Qué te ocurre? ¿Quieres un bonus?
Rocío estaba en el rellano de las áticos y se dispuso a llamar al Ático A. Sonia le abrió la puerta.
ROCÍO: ¡Sonia amigaaaaaa!
SONIA (En tono borde): ¿Qué quieres?
ROCÍO: Uy que antipática… De verdad, hija, que mal te ha sentado el embarazo.
SONIA: ¡Sí has venido a recordarme lo amargada que estoy por tener un hijo ya te puedes estar yendo!
ROCÍO: ¡Que no! Que la Rocy ha tenido un plan fantástico. ¡Esta noche nos vamos por el campo de barbacoa!
SONIA: ¿Barbacoa? ¡Qué eso engorda!
ROCÍO: Otra… ¡Pero si la barbacoa es una excusa para hacer botellón y emborracharnos! Venga apúntate, si lo estás deseando, ¡si a ti te el mocho!
Amparo se asoma a la puerta.
AMPARO: ¡¿Qué haces tú aquí?! ¡Qué no quiero más cremas! ¡Que no me hacen efecto!
ROCÍO: No, si venía a invitar a tu hija a una barbacoa, pero no quiere.
AMPARO: Hija, tienes que salir a que te dé el aire, ¿es que no te ves? ¡Qué estás amargada! Rocy, guapa, tú no te preocupes, que esta noche se va con vosotros.
SONIA: Mamá, que no.
AMPARO: ¡Si digo que sí, es que sí! ¡CONA! (Cierra la puerta y da un portazo).
ROCÍO: Bueno, pues a prepararlo todo.
Amparo se va al salón donde estaba Jesús.
AMPARO: ¡Jesús, Jesús!
JESÚS: ¡Ay, no me molestes que estaba leyendo el evangelio de hoy!
AMPARO: ¡Deja esto! (Tira el libro al suelo).
JESÚS: ¡Oye! ¡Lleva cuidado que está firmado por Monseñor Rouco Varela!
AMPARO: ¡Qué esta noche los alquilados se van de barbacoa y dejan la casa sola!
JESÚS: Ah, pues muy bien, podemos aprovechar para hacer una inspección. Cómo estén las paredes arañadas, ¡de patitas en la calle!
AMPARO: Que no, que podríamos entrar y… hacer el amor allí…
JESÚS: (Se levanta del sofá) ¡Oh! ¡¿Pero estás loca?! Te ha poseído el demonio ¿o qué?
AMPARO: Ay si es que creo que hemos entrado en la rutina… ¿A ti no te pone hacerlo en el sofá de los alquilados? ¡A mí mucho! ¿Te imaginas?
JESÚS: Eres muy viciosa…
AMPARO: ¿Eso es un sí?
JESÚS: (Mira hacia arriba) Señor perdóname… (Mira a Amparo) ¡Pero si nos pillan yo no quiero saber nada! ¿Eh? (Se santigua).
ROCÍO: Bueno, ¿entonces te apuntas?
SERGIO: Si es que yo no soy muy de barbacoas… ¡Yo soy más de chiringuitos! Uy, me ha recordado a una canción de Georgie Dann.
ROCÍO: Vienen Marta y Sonia…
SERGIO: (Se levanta del sofá) ¿A qué hora has dicho que es la barbacoa? ¡Hay que comprar comidas, bebidas…! ¡Venga vamos a prepararlo todo! (Se sube a su habitación).
ROCÍO: Ale, pues a ver como consigo yo que Marta y Sonia se apunten.
CARLOS: Es que Rocío, te metes en unos fregaos…
ROCÍO: ¡Tú convence a Marta y yo a Sonia!
CARLOS: ¿Y yo a Marta por qué?
ROCÍO: Porque entre los homos hay más confianza.
CARLOS: Ah, vale
LOLA: ¡Uy Calvin que nervios! ¡Es la primera vez que salgo en televisión! Bueno, algún que otro año en las fiestas de mi pueblo cantaba y bailaba en los escenarios, pero es que esto es otra división… ¿Te imaginas que nos preguntan algo?
CALVIN: ¡¿Qué dices?! Pues espero que no.
LOLA: ¡Empieza en media hora! ¡Aaaah! Que nervios.
MARTA: ¡Uy Sonia! Yo creía que tú no ibas a venir.
SONIA: Ni yo que ibas a venir tú, vamos es que si lo sé no vengo.
MARTA: ¡¿Pero por qué me dices esas cosas?! ¿No me quieres? ¡Me voy! (Se da media vuelta).
ROCÍO: ¡De aquí no se va ni dios!
SERGIO: ¿Pero dónde vamos a parar? ¡Que yo ya tengo hambre! Me comería cualquier cosa… (Le guiña el ojo a Sonia).
MARTA: Oye, ¿le estás tirando los tejos a mi chica?
SONIA: ¡Oh! ¿Perdón? Yo no soy tu chica.
MARTA: (Ríe nerviosamente) ¿He dicho chica? Quería decir paciente… Jejeje, (dice por lo bajo): ¡Ya estás dando el cante, Martita!
CARLOS: ¡Bueno venga vamos a poner ya la barbacoa que tengo ganas de salchichas!
SERGIO: Tú siempre pensando en el sexo ¿eh?
CARLOS: Sergio, de verdad, tus chistes ya cansan…
ROCÍO: ¡Oh dios!
El Gran Debate, estaba a punto de comenzar.
JORDI: ¡Buenas noches! ¡Buenas noches a todos! (Se mira el reloj) Cuando son las diez en punto de la noche, comienza el gran debate. Hoy debatiremos una preguntas que muchos se preguntan, valga la redundancia. ¿El amor tiene edad?, Sandra, ¿Qué dicen en la calle?
En el público, Lola y Calvin estaban sentados juntos.
LOLA: Pues Jordi gana más en persona que en la tele… Está más delgado y todo.
SEÑORA: Señora, cállese que no oímos.
LOLA: ¡Cállate tú! ¡¿Quién se ha creído la vieja para mandarme a callar?!
SOÑORA: ¿A que llamo al realizador y te echan?
LOLA: ¡¿A qué te arranco los cuatro pelos que tienes en la cabeza?!
CALVIN: Lola, por dios, contrólate, que nos van a echar.
Nuestros alquilados, ya habían cenado.
SERGIO: No puedo más voy a explotar.
CARLOS: Normal, te has comido todo el chorizo tu solo.
SERGIO: Estoy que vomito, vamos a llamar a alguien que quiero irme a mi casa y ponerme a ver la tele…
ROCÍO: ¿La tele? (Se mira al reloj) ¡Uy no! ¡Que aún es temprano! ¡Vamos a darle al botellón! ¿Quién quiere un chupito de orujo?
SONIA: ¡Yo!
MARTA: Sonia, que te he prohibido el alcohol…
SONIA: ¡A la mierda la terapia!
MARTA: ¡Oh!
Empiezan a oírse unas sirenas.
MARTA: ¿Y esas sirenas?
SERGIO: ¿Sirenas en el campo? ¡Pero si las sirenas son del agua! Esta chica mucha carrera mucha carrera pero luegoo…
ROCÍO: ¡Ostras que es la pasma!
CARLOS: ¡Los pitufos! ¡Oh! (Iba un poco bebido) ¡Pues yo quiero que me den con la porra! Jajaja.
ROCÍO: Ay madre que creo que vienen hacia aquí…
MARTA: Bueno, no hemos hecho nada malo, digo yo…
La policía llegó donde estaban los alquilados.
POLICÍA: ¿De botellón?
SERGIO: No, que va… (Se pone nervioso). Es que estábamos de excursión por el campo y hemos dicho, ¡pues vamos a pararnos aquí a descansar que hace un sol estupendo!
POLICÍA: Un Sol estupendo, sí… ¿a las once de la noche?
SERGIO: Es que el tiempo está de un loco…
POLICÍA: ¿Y esas botellas de ahí?
ROCÍO: ¡Para animarnos un poco que después de comer apetece!
POLICÍA: ¿Y con que habéis hecho de comer?
SERGIO: ¡Con una barbacoa! Te daríamos algo, alguna chistorra o salchicha, pero es que nos las hemos comida todas…
POLICÍA: ¡¿Qué?! ¿Pero estáis locos? ¡Podríais haber provocado un incendio!
CARLOS: Bueno, bueno, pero no vamos a entrar a analizar lo que pudo ser y no fue. ¿Qué haces mañana por la noche?
POLICÍA: Estoy casado y no soy homosexual.
ROCÍO: Eh… ¡Pues yo estoy disponible! (Marca escote).
POLICÍA: ¡Qué estoy casado y tengo hijos!
ROCÍO: Bueno, pero ellos no tienen por qué enterarse…
POLICÍA: ¡Bueno ya está bien! ¡Todos a comisaría por listos! ¡Se os va a caer el pelo por hacer una barbacoa en un sitio prohibido! ¡Estáis en una reserva natural! ¡Podríais haber provocado un incendio! ¡Inconscientes!
ROCÍO: Ah pues que bien, vamos a pasar la noche en comisaria.
MARTA: Oye, pues siempre hay una primera vez para todo ¿eh? ¡Otra anécdota más que contar!
CARLOS: Rocío, pedazo de plan ¿eh?
ROCÍO: Si, vamos, ya una cosa loca…
Mientras, Lola y Calvin seguían en El Gran Debate.
JORDI: Bueno, seguimos con el debate, llegó el momento de escuchar la opinión del público.
SANDRA: Exacto Jordi, tengo a mi lado a una pareja, una mujer madura y un chico joven… Hola, ¿Cuánto tiempo lleváis juntos?
CALVIN: Eh… ¿me dices a mí?
SANDRA: Claro.
CALVIN: Eh… bueno, mucho… mucho tiempo sí. Oye esto luego se corta ¿eh? Porque vaya vergüenza.
LOLA: ¡Calvin por dios que es en directo! Perdónale, es que es un chico muy tímido. A mí, Calvin me enamoró por su simpatía, sí, es más joven que yo ¿y qué? Nos amamos mucho y eso es lo que importa. (Le da un beso a Calvin).
CALVIN: ¡Aaaah! ¡Quita bicho! ¡Yo a ti no te quiero estoy contigo por tu dinero!
LOLA: ¡Pero si no tengo un duro!
CALVIN: (Sobreactúa) ¡¿Cómo?! ¿Me has estado engañando todo este tiempo? ¡¡Pues te dejo ahora mismo!!
SONIA: ¿Pasa algo?
ROCÍO: No, nada, aquí podemos parar, pero una preguntilla… ¿Alguien sabe volver a casa?
Todos se miran.
CARLOS: ¡Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah! ¡Nos hemos perdido! ¡Vamos a morir! ¡Vamos a tener que comernos los unos a los otros para poder sobrevivir!
SERGIO: Ah, pues entonces Sonia, si quieres, cómeme.
SONIA: ¡Qué no me marees!
SERGIO: ¡Pero si lo estás deseando! Tú siempre has sido una chica fácil.
MARTA: Ya no, mi terapia le ha ayudado a cambiar, ya no es la puta de antes.
SERGIO: Sonia, ten cuidado, que ésta te come el coco para que seas lesbiana ¿eh?
CARLOS: ¡Bueno vamos a ver! Rocío, ¿cómo que nos hemos perdido? ¡Si llevas un mapa!
ROCÍO: Sí… eso creía…
SERGIO: Ala, pero si eso no es un mapa, ¡es un desplegable! (Lo abre) ¡Pero si es el Mario Casas! ¡Serás guarra! ¿Cómo lo has confundido con un mapa?
ROCÍO: ¡Yo que sé! Yo he visto un papel grande doblado y he dicho: pues será un mapa.
SONIA: Oye, pues es mono el chaval.
MARTA: ¡Uy! (Coge el desplegable).
CARLOS: ¡Esto no nos sirve para nada! Bueno, jeje, sí que sirve, ¡pero para esto no! (Le coge el desplegable a Marta y se lo guarda disimuladamente en el bolsillo).
SERGIO: Bueno, pues yo tengo hambre, primero comemos y luego ya pedimos auxilio… A todo esto, ¿a quién se le pide el auxilio? ¿Qué es? ¿Cómo una especie de móvil o GPS?
SONIA: Anda, anda, haz la comida ya y no pienses tanto.
El Gran Debate, estaba a punto de comenzar.
JORDI: ¡Buenas noches! ¡Buenas noches a todos! (Se mira el reloj) Cuando son las diez en punto de la noche, comienza el gran debate. Hoy debatiremos una preguntas que muchos se preguntan, valga la redundancia. ¿El amor tiene edad?, Sandra, ¿Qué dicen en la calle?
En el público, Lola y Calvin estaban sentados juntos.
LOLA: Pues Jordi gana más en persona que en la tele… Está más delgado y todo.
SEÑORA: Señora, cállese que no oímos.
LOLA: ¡Cállate tú! ¡¿Quién se ha creído la vieja para mandarme a callar?!
SOÑORA: ¿A que llamo al realizador y te echan?
LOLA: ¡¿A qué te arranco los cuatro pelos que tienes en la cabeza?!
CALVIN: Lola, por dios, contrólate, que nos van a echar.
Nuestros alquilados, ya habían cenado.
SERGIO: No puedo más voy a explotar.
CARLOS: Normal, te has comido todo el chorizo tu solo.
SERGIO: Estoy que vomito, vamos a llamar a alguien que quiero irme a mi casa y ponerme a ver la tele…
ROCÍO: ¿La tele? (Se mira al reloj) ¡Uy no! ¡Que aún es temprano! ¡Vamos a darle al botellón! ¿Quién quiere un chupito de orujo?
SONIA: ¡Yo!
MARTA: Sonia, que te he prohibido el alcohol…
SONIA: ¡A la mierda la terapia!
MARTA: ¡Oh!
Empiezan a oírse unas sirenas.
MARTA: ¿Y esas sirenas?
SERGIO: ¿Sirenas en el campo? ¡Pero si las sirenas son del agua! Esta chica mucha carrera mucha carrera pero luegoo…
ROCÍO: ¡Ostras que es la pasma!
CARLOS: ¡Los pitufos! ¡Oh! (Iba un poco bebido) ¡Pues yo quiero que me den con la porra! Jajaja.
ROCÍO: Ay madre que creo que vienen hacia aquí…
MARTA: Bueno, no hemos hecho nada malo, digo yo…
La policía llegó donde estaban los alquilados.
POLICÍA: ¿De botellón?
SERGIO: No, que va… (Se pone nervioso). Es que estábamos de excursión por el campo y hemos dicho, ¡pues vamos a pararnos aquí a descansar que hace un sol estupendo!
POLICÍA: Un Sol estupendo, sí… ¿a las once de la noche?
SERGIO: Es que el tiempo está de un loco…
POLICÍA: ¿Y esas botellas de ahí?
ROCÍO: ¡Para animarnos un poco que después de comer apetece!
POLICÍA: ¿Y con que habéis hecho de comer?
SERGIO: ¡Con una barbacoa! Te daríamos algo, alguna chistorra o salchicha, pero es que nos las hemos comida todas…
POLICÍA: ¡¿Qué?! ¿Pero estáis locos? ¡Podríais haber provocado un incendio!
CARLOS: Bueno, bueno, pero no vamos a entrar a analizar lo que pudo ser y no fue. ¿Qué haces mañana por la noche?
POLICÍA: Estoy casado y no soy homosexual.
ROCÍO: Eh… ¡Pues yo estoy disponible! (Marca escote).
POLICÍA: ¡Qué estoy casado y tengo hijos!
ROCÍO: Bueno, pero ellos no tienen por qué enterarse…
POLICÍA: ¡Bueno ya está bien! ¡Todos a comisaría por listos! ¡Se os va a caer el pelo por hacer una barbacoa en un sitio prohibido! ¡Estáis en una reserva natural! ¡Podríais haber provocado un incendio! ¡Inconscientes!
ROCÍO: Ah pues que bien, vamos a pasar la noche en comisaria.
MARTA: Oye, pues siempre hay una primera vez para todo ¿eh? ¡Otra anécdota más que contar!
CARLOS: Rocío, pedazo de plan ¿eh?
ROCÍO: Si, vamos, ya una cosa loca…
Mientras, Lola y Calvin seguían en El Gran Debate.
JORDI: Bueno, seguimos con el debate, llegó el momento de escuchar la opinión del público.
SANDRA: Exacto Jordi, tengo a mi lado a una pareja, una mujer madura y un chico joven… Hola, ¿Cuánto tiempo lleváis juntos?
CALVIN: Eh… ¿me dices a mí?
SANDRA: Claro.
CALVIN: Eh… bueno, mucho… mucho tiempo sí. Oye esto luego se corta ¿eh? Porque vaya vergüenza.
LOLA: ¡Calvin por dios que es en directo! Perdónale, es que es un chico muy tímido. A mí, Calvin me enamoró por su simpatía, sí, es más joven que yo ¿y qué? Nos amamos mucho y eso es lo que importa. (Le da un beso a Calvin).
CALVIN: ¡Aaaah! ¡Quita bicho! ¡Yo a ti no te quiero estoy contigo por tu dinero!
LOLA: ¡Pero si no tengo un duro!
CALVIN: (Sobreactúa) ¡¿Cómo?! ¿Me has estado engañando todo este tiempo? ¡¡Pues te dejo ahora mismo!!
Los alquilados y Sonia estaban en comisaria. Estaban sentados en unas sillas y frente a ellos había una tele.
SERGIO: Oye, pues que práctico que haya una tele en una comisaría, así la espera se hace más corta. (Coge el mando). Voy a ver que están echando…
CARLOS: ¡Rocío! ¡Qué va a ver a Calvin y a Lola!
ROCÍO: ¡Oh! ¿Ah sí? Pues mira mejor, así me hecho unas risas… ¡Ya estoy harta de tener que idear planes para que luego salgan todos mal!
Sergio lo puso en el canal donde estaba el programa de Lola y Calvin.
SERGIO: ¡Anda mira que graciosos! Esos se parecen un montón a Calvin y a mi madre. ¿Verdad?
SONIA: ¡Pero si son ellos de verdad!
SERGIO: No jodas… ¿Sí?
LOLA: Perdonad a mi Calvin, es que se pone nervioso.
SANDRA: A ver, vosotros sois pareja, contarme, ¿Qué sabe vuestra familia de esto?
CALVIN: ¡No sabe nada porque yo a esta vieja no la voy a presentar a mi familia!
LOLA: (Llorando) ¡Calvin por favor no me hagas más daño! ¡Nos amamos!
CALVIN: ¡Vieja!
LOLA: (Se levanta y le pega un bofetón a Calvin) ¡¡Repíteme eso otra vez porque te rompo la cara!!
SANDRA: ¿Ocurre algo?
CALVIN: ¡¡Estoy muy nervioooooso!! (Se limpia el sudor de la frente con un pañuelo). ¡Estoy muy nerviosoooo! (Se levanta del asiento y se larga del plató).
LOLA: ¡Calvin no me hagas un Noemí en pleno directo por favor te lo pido! ¡Quédate aquí como un hombre! Qué vergüenza dios mío, que vergüenza…
SANDRA: Bueno pues, dejemos a esta pareja… (La cámara mira para otro lado) Jordi, prosigue con el debate de ¿El amor tiene edad?
JORDI: Gracias Sandra, perdonad este pequeño incidente. Ah, una cosa, (mira su Tablet) ¡El Gran Debate ya es Trending Topic!
Todo el público aplaude.
Sergio estaba en shock…
SERGIO: ¿E…eso era un debate para saber si el amor tiene edad? ¿Y qué pintan ahí Calvin y Lola?
ROCÍO: Sergio… tu madre y Calvin han estado juntos durante mucho tiempo, lo siento… Aunque bueno, de sentir nada que ya lo sabíamos todos, bueno, todos no, todos menos tú.
SERGIO: ¡¿QUÉ?!
POLICIA: Chicos, por esta vez os vamos a perdonar, más que nada porque el calabozo está a rebosar, os vamos a poner en libertad, pero que no se vuelva a repetir ¿vale?
CARLOS: ¡Vale guapo!
MARTA: Sonia, ¿te acompaño a casa?
SONIA: No, ya me sé el camino yo solita.
Rocío, Carlos y Sergio estaban en el rellano a punto de entrar a casa.
ROCÍO: Sergio, ¿estás bien? … No contesta, Carlos, creo que le ha pasado algo.
Pasan a casa.
AMPARO: ¡Sí! ¡Sí! ¡Dame más, dame más Jesús! ¡Eres una fiera!
JESÚS: ¡Ooooch! ¡Cómo me pones! ¡Voy a tener un éxtasis como Santa Teresa!
Los alquilados se quedan alucinados.
CARLOS: ¿Hola?
AMPARO: ¡Oh! ¡Aaaaaaaaaah! ¿Pero no estabais de barbacoa?
JESÚS: Ay por dios, nos ha castigado el señor… Padre nuestro que estás en el cielo santificado…
AMPARO: ¡Como comentéis algo de esto es que os subo el alquiler! ¡¡GENTUZA!!
Amparo y Jesús se van corriendo.
ROCÍO: ¡Alucino con esta gente! ¡Y encima nos llama gentuza a nosotros! ¡ENFERMOS!
Sergio empezó a subir las escaleras.
CARLOS: ¿A dónde vas?
SERGIO: ¡A hacer las maletas!
ROCÍO: ¿Te vas?
SERGIO: No, yo no…
ROCÍO: ¿Entonces?
Al cabo de unos minutos Calvin y Lola llegaron y Sergio empezó a tirar la maleta de Calvin por las escaleras.
SERGIO: ¡Te vas a ir a la mierda!
LOLA: ¡No por favor, hijo! ¡No me separes de mi Calvin, por favor te lo pido!
CARLOS: ¿Pero se va a ir Calvin? No me lo creo…
CALVIN: Está claro que nunca he sido querido en esta casa… Si no me queda otra alternativa, me iré.
LOLA: ¡No, por favor! ¡Calviiiiiiin! ¡NOOOOOOOOOOOOOOO! ¡Hijo no le eches, por favor te lo pido! ¡Si él se va yo me voy con él!
CALVIN: Adiós. (Cierra la puerta y se va).
SERGIO: ¡No vuelvas en tu puta vida!
LOLA: ¡Calvin! ¡Nooooooooooo! (Da golpes a la puerta) ¡Acuérdate siempre de mí! (Llora).
ROCÍO: Sergio te has pasado… No ha hecho nada malo.
SERGIO: ¡Se ha aprovechado de mi madre! ¡Le advertí hace tiempo que no se acercara a ella! El que avisa no es traidor.
LOLA: (Se tira al suelo y llora amargamente) Caaalvin, querido…
Calvin salió de la urbanización con su maleta.
CALVIN: Ahora a ver dónde voy yo. ¿Tendré que volver a casa de mis padres? Dios mío…
Se acerca un hombre.
EDUARDO: ¿Calvin?
CALVIN: Sí, soy Calvin, ¿nos conocemos?
EDUARDO: Me llamo Eduardo Gabilondo, soy cazatalentos y productor, encantado.
Calvin y Eduardo se dan la mano.
Mientras tanto, Jesús y Amparo estaban metidos en la cama.
AMPARO: Que vergüenza, ya no voy a poder mirarles a la cara. Ahora el alquiler se lo pides tú.
JESÚS: ¡Si hombre, se lo pides tú!
AMPARO: Bueno, vamos a dormir que mañana ya será otro día.
JESÚS: Por cierto, cariño, ¿tú me quieres?
AMPARO: Pues claro.
JESÚS: ¿Cuánto?
AMPARO: Mucho.
JESÚS: ¿Hasta dónde?
AMPARO: Hasta mañana ya, duérmete (Apaga la luz).
JESÚS:
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